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Características y contexto
El arte Rococó se desarrollo durante los años 1720 y 1780 en la primera etapa del Barroco. Se destaca sobre todo por su elegancia, cuyos contornos en sus figuras y retratos son fluidos. Introducen elementos naturales para representar temas relacionados con el amor, la pasión, la teatralidad que compone la exposición de cada lienzo, la diversión y la exaltación de la propia belleza.
Este estilo pictórico surgió en París como fruto de los excesos de la nobleza barroca. La denominación de la palabra Rococó deriva de la combinación de los términos «rocaille», (pedregal) y «coquille», (concha), en su primera fase surgió como un movimiento predominante de elegancia y decoración de interiores, para luego pasar a la arquitectura y finalmente a la pintura y escultura. Además de desarrollar su actividad dentro de Francia, el arte rococó se extendió por Europa.
Principales exponentes del arte rococó
Hubo numerosos artistas destacados, sobre todo pintores como François Boucher (1703-1770), Jean-Antoine Watteau (1684-1721) y Jean-Honoré Fragonard (1732-1806). No obstante, también es necesario tener en cuenta a todas aquellas pintoras y artistas que destacaron notablemente en este movimiento. Como principales exponentes tenemos a Anna Dorothea Therbushch (1721-1782), Marie-Thérèse Reboul (1738-1806), Marguerite Gérad (1761-1837) y por supuesto a Rosalba Carriera, (1673-1757).
La mayor parte de estas mismas artistas enfocaron su trabajo en retratos pictóricos delicados y de sutil rococó, incluyendo representaciones de naturalezas muertas y escenas de género.
Rosalba Carriera, retratista de grandes monarcas
Fue una pintora veneciana que destaco en Francia a través de sus retratos, se convirtió en una de las pintoras más influyentes de su género obteniendo un gran éxito dentro del movimiento rococó. Sus retratos destacan sobre todo por sus figuras realzadas y al mismo tiempo delicadas, exhibiendo en sus personajes una exquisita suavidad y sutileza en cada contorno. Técnicamente, no elaboraba un diseño previo para sus producciones pictóricas, sino que, directamente pintaba con el pastel. Sus obras a día de hoy son consideradas como las más competentes de este movimiento parisino, ya que sus figuras contienen las poses de sus bustos, cuyos cuerpos se encuentran ligeramente envueltos y sus cabezas giradas para dirigir su mirada al espectador. Rosalba Carriera comprendía un indudable talento para la expresión de diferentes texturas en sus diseños, recreando fielmente galones de oro, telas, encajes, pieles de animales, joyas, la piel, los cabellos, etc.
En 1705, Rosalba fue aceptada como «accademico di merito» por la academia de San Lucas romana, un titulo que fue solo y exclusivamente reservado para los pintores no romanos mas destacados. En 1720 también fue admitida en la Academia de Bolonia.
A partir de ese año Rosalba Carriera viajo a París para residir allí, durante ese tiempo realizaba pinturas naturalistas, cuadros de montañas y visitaba diferentes museo y exposiciones en colecciones privadas. Un año más tarde, fue elegida para ser miembro del «Academy Royale de Peinture et Sculpture.»
Trabajó para numerosos mecenas en diversas ciudades de Europa. Produjo sobre todo retratos para monarcas de este mismo continente y también a las familias reales polacas y francesas. A pesar de que en su juventud se especializara en retratos en miniatura, más tarde empezó a desarrollar obras mediante la técnica a pastel, un material muy apreciado debido al resultado en su producción, unos perfiles finos y floridos toques de color muy suaves. Esto conllevo que Rosalba influyera al propio colectivo para su utilización, convirtiendo al pastel en el material de moda favorito de la pintura parisina.
La última obra de Rosalba data del año 1746. Murió en 1757.